una joya en el corazón de la ciudad con encanto y tranquilidad

Mi estancia fue maravillosa, el ambiente era increíble y disfruté mucho de la atención personal, especialmente con Pascal que nos ofreció recomendaciones útiles para explorar los alrededores, mientras que las hermosas vistas desde la azotea hicieron que cada desayuno fuera especial. el hotel está a solo 15 minutos a pie de la famosa plaza Jemaa el-Fnaa y cerca del Jardín Majorelle, lo que facilita descubrir el encanto de Marrakech.

La habitación era grande y muy limpia.

Estuvimos en Riad Soundouss y la experiencia fue increíble. Pascal nos recibió con un té y un mapa, brindándonos recomendaciones útiles. La azotea es perfecta para desayunar. La única queja sería un poco de frío en la habitación, pero la mantita compensó. ¡100% recomendable!

El ambiente del riad es realmente encantador y acogedor.

Tuve algunos problemas durante mi estancia. La habitación no tenía ventana, lo que hizo que el ambiente fuera bastante triste durante el día. Además, la entrada al riad es un poco confusa y puede dificultar la llegada, especialmente si es la primera vez que visitas Marrakech. A veces, los enchufes estaban escondidos, lo cual es incómodo cuando necesitas cargar varios dispositivos.

El Riad es un oasis de tranquilidad con decoraciones exquisitas. La habitación era muy cómoda y el ambiente es simplemente encantador. Además, hay un bonito salón con chimenea para disfrutar de un buen rato.

Aunque tenía ganas de enchufar todos mis dispositivos, los enchufes eran un juego de escondite.

Es un lugar excepcional para familias

El ambiente era increíble, desde que llegamos nos ofrecieron un té muy bueno, cosa que me sorprendió. Además, el gerente, Jean Francois, era muy amable, nos hizo sentir como en casa desde el primer instante y la habitación era amplia y limpia.

No fue barato, pero aún así estaba aceptable.

El servicio fue excepcional, con el personal siempre atento y dispuesto a ayudar, lo que realmente hizo la diferencia. La decoración del lugar es exquisita y genera un ambiente acogedor, permitiendo disfrutar de momentos de tranquilidad. Sin embargo, la ubicación puede ser un poco confusa al principio, y la habitación no contaba con suficientes enchufes. Aunque la comida era buena, sería ideal tener opciones más variadas para el almuerzo o la cena.

Fue una opción perfecta para un breve retiro en Marrakech con muy buena relación calidad-precio. El personal fue súper amable y nos dieron buenos consejos para explorar la ciudad. Si puedes, pide habitación en un piso alto para más calma.

La habitación era increíble, pero hacía un poco de frío al ducharte. Un buen té y atención top.

El Riad es un verdadero oasis en el bullicio de la ciudad. La atención del personal es insuperable, siempre listos para ayudar. El desayuno variado y delicioso es un gran plus. La ubicación es perfecta para explorar la medina.

La entrada al Riad puede ser un poco confusa al principio, así que tener una buena indicación sería útil.

el riad es una belleza total, la decoración es pura onda. el desayuno es otro nivel, te traen de todo, no paran! y el staff, super amables y siempre listos para ayudar. la ubicación está chida, a solo 15 min caminando de la plaza, y el taxi llega muy cerquita. el ambiente es perfecto para relajarte después de un día loco en la ciudad.

la entrada al riad puede ser un poko confusa, y a veces los enchufes estaban un poco escondidos.

Disfruté de un desayuno al sol en la azotea mientras escuchaba los pájaros. El personal era atento y servicial. realmente hicieron la diferencia en mi experiencia. La habitación que tuve era amplia y cómoda, lo que me ayudó a descansar del bullicio de la ciudad.

La entrada al lugar es un poco confusa y a veces es difícil encontrar los enchufes en la habitación. El ambiente general fue un poco frío, lo que dificultó un poco la comodidad.

Desayuno espectacular y atención maravillosa

La azotea es el lugar perfecto para desayunar al sol, mientras escuchas el canto de los pájaros. Además, el servicio fue excepcional. recibí un trato muy amable por parte del personal, especialmente de Pascale, quien siempre estaba dispuesta a ayudar y brindar recomendaciones sobre la ciudad. Sin embargo, me gustaría que la habitación hubiese tenido mejor ventilación, ya que no tenía ventana y durante el día se sentía un poco triste.

La atención del personal, en especial de Jean-François, fue excepcional y siempre estuvo dispuesto a ayudarnos. La habitación era amplia y cómoda, y la ducha era como tener un pequeño hammam privado. Además, el desayuno era siempre delicioso, con una variedad de platos tradicionales presentados de manera exquisita. La ubicación es ideal para explorar la ciudad, ya que está a solo unos minutos a pie de la medina, pero suficientemente lejos del bullicio para disfrutar de tranquilidad.

Nada a mencionar.